Hasta hoy, las campañas políticas en Empalme se desarrollan con relativa tranquilidad. Ayer por la mañana me tocó ver a Héctor Laguna Torres y Javier Caraveo Rincón, candidatos respectivos a la alcaldía y la diputación local, haciendo tarea de proselitismo en el mercado municipal. Acompañaban al aspirante al senado. Ambos se ven bastante relajados con el compromiso que traen de convencer a la gente para que vaya a las urnas el próximo primero de Julio.
En Empalme hay evidente tendencia, según encuestas, a favor de los candidatos del PAN, aunque hay que decirlo, el profesor José Trinidad Flores Mendoza, que busca la alcaldía ahora por el Verde Ecologista, empieza a lograr buena penetración en sus recorridos por las diversas colonias del municipio. Ayer anduvo en los complicados vericuetos de la colonia Ronaldo Camacho. Al menos logró algo que es importante en estos menesteres: la gente escuchó las propuestas que viene haciendo.
Es cierto, “El Profe Trini” llegó a la campaña precedido de la carga negativa que dejó la administración priísta de Samuel Rodríguez Sánchez, de la cual fue Secretario del Ayuntamiento, pero hasta hace unas semanas, antes de que lo arropara el PVEM, prevalecía la inconformidad que surgió cuando le negaron ser candidato a alcalde hace tres años, cuando el PRI se fue hasta el sótano de las preferencias con Ernesto Valdés, un candidato que vino a darle “el tiro de gracia” a los tricolores.
La buscó de nuevo en esta ocasión, pero los priístas que toman decisiones por la mayoría se fueron a favor de Edgar Vázquez Tello, quien sigue sin mostrar una buena estructura ni estrategias bien definidas para tratar de recuperar para el PRI la alcaldía. Hasta ahora el paso de Vázquez Tello es sólo para quedarse con el “voto duro” del PRI y con eso depender durante tres años del erario gracias a una regiduría plurinominal. Es decir, los resultados para él son satisfactorios si llegó con ese propósito a la contienda.
De los perredistas no se sabe nada.
Laguna Torres, mientras tanto, se dedica a hacer lo suyo. A Héctor le está funcionando haber tratado de hacer bien las cosas cuando diputado local. Sobre todo por que mantuvo la presencia ante la familia empalmense. Muchos priístas lo ven como virtual ganador de la contienda, y hay quienes ahora aseguran que haberle negado la candidatura al doctor Felipe David Martínez Robles fue más bien para protegerlo. “Empalme es del PAN”, dice un reconocido militante tricolor.
Lleva un paso muy firme rumbo a la alcaldía, y sólo que las cosas cambiaran radicalmente en este último mes de campaña evitaría que fuera el sucesor de Joel Fuentes Cruz. Y si gana, y hace las cosas como cuando estuvo en el Congreso local, con responsabilidad y seriedad, podría ser un buen alcalde.