Cuando Marco Antonio Ulloa Cadena dimitió al PRI para
irse a competir por la diputación federal bajo las siglas de otro partido
político, quizá no consideró la posibilidad de que estaba tomando la mejor
decisión de su vida. Actual dirigente estatal de Movimiento Ciudadano, “El
Cachorro” está viviendo una realidad que no conoció en el tricolor, donde
sistemáticamente le cerraron las puertas al legítimo derecho que tenía de hacer
una carrera política.
Figura central en su momento del comité municipal del
PRI, Ulloa Cadena fue lo más lejos que pudo llegar. Cuantas veces exhibió sus
intenciones de competir por un puesto de elección popular, hasta su misma gente
“de confianza” llegó a traicionarlo. Los ánimos de Ulloa Cadena, quien
paulatinamente se convirtió en un fuerte crítico al interior del partido, se
fueron reduciendo, hasta que finalmente aceptó la perspectiva de apoyar a
Andrés Manuel López Obrador, lo que le abrió las puertas a una verdadera oportunidad
de figurar con más fuerza dentro de la política.
Hoy Marcos se “codea” en los más altos niveles de la
izquierda en el país, y después de los resultados obtenidos en el proceso
electoral del año pasado, recibe el apoyo a manos llenas de parte de la
dirigencia nacional. Por sí solo, “El Cachorro” obtuvo cerca de 34 mil votos en
la disputa por la diputación federal por el 04 Distrito, competencia que ganó
Antonio Francisco Astiazarán Gutiérrez. Es decir, pasó por encima de Leslie
Pantoja Hernández, una fantasmal candidata del PAN, y del profesor Fermín
Trujillo Fuentes, de Nueva Alianza pero apoyado por los panistas. Y resulta que
Marcos ocupa de 30 mil votos a nivel Sonora para tener una representación de
nivel plurinominal en el Congreso de la Unión.
Para un partido cuya representatividad en Sonora aún no
tenía un nivel que representara riesgo para otros, incluyendo el mismo PAN, lo
que Marcos hizo lo mandó “a los cuernos de la luna”, y de ahí se derivó el ofrecimiento
que tuvo para convertirse en el hoy dirigente estatal, con amplias perspectivas
de hacer un trabajo de fondo que permita a MC reforzar su tarea que a nivel
nacional procura convertirse en la cuarta fuerza electoral.
Y aún falta más. Por lo pronto, el conocido empresario
guaymense Sergio Carlos García Razcón se prepara para, dentro de unos días,
convertirse en el nuevo dirigente municipal de MC. Con recursos provenientes
del presupuesto estatal del partido, Ulloa Cadena remoza las oficinas de la
calle 16, pero al mismo tiempo se hace tarea similar en otros municipios
importantes en la entidad. El propósito de Marcos es dar una presencia íntegra,
en todos los aspectos, a un partido que en unos años más podría estar en un
mejor posicionamiento, tanto por el trabajo que se está haciendo como por los
graves errores que se cometen en otros organismos políticos.
Al menos en Guaymas, el 2015 podría traer sorpresas en la
cuestión electoral. La fuerza que está tomando la figura de Marcos después de
los frutos obtenidos el año pasado, podrían derivar en una campaña política con
“El Cachorro” a la cabeza.