Leo
esta mañana una nota en un diario de circulación nacional que dice que, en un
comunicado fechado el 4 de octubre del año pasado, la directora del plantel de
Torreón, donde ocurrió un ataque armado por parte de un chamaco de 11 años que
dejó muertos a su maestra y a él mismo, notificó a la supervisora de la zona
escolar correspondiente, la negativa de los padres de familia para que a sus
hijos se les revisaran las mochilas al llegar a la escuela.