Infamia de Morales Uruchurtu

Cobra venganza por cuestionamientos de Javier Millán y ordena arbitrariamente el cierre de su negocio
Fernando Villa Escárciga
Si de “vanguardismo histórico” se trata, el guaymense Jesús Morales Uruchurtuinauguró en Sonora el delito federal de atentar contra un periodista.
En sus arrebatos de histeria el director de Infraestructura Urbana y Ecología ordenó cerrar el negocio de Francisco Javier Millán Vázquez, director de Carta Millán.
Doble es la agresión de Uruchurtu al también agredir el derecho al trabajo deLuis Alberto Millán Barriga, hijo de Francisco Javier, y copropietario del negocio Chefcito Taco Fish.
Hace alrededor de dos meses Luis Alberto inauguró el establecimiento de comida sobre un predio de particulares, para lo cual formalizó un contrato de arrendamiento.
Mientras, ejerciendo su derecho a la libertad de expresión consagrado constitucionalmente,Carta Millán daba cuenta y criticaba las irregularidades de Uruchurtu como funcionario.
Las rabias del funcionario no se hicieron esperar y en varias ocasiones amagó a Francisco Javier, quien con el valor que le caracteriza mantuvo su corrosiva línea editorial.
Hoy, argumentando que Chefcito Taco Fishobstruye el arroyo y derecho de vía de la prolongación del bulevar Diana Laura Riojasordenaron el cierre del negocio.
Uruchurtu también impuso una multa, así lo firma en una resolución ejecutada por sus esbirros, por 2 mil 325 pesos.
Los argumentos del funcionario represor se derrumban con un plano oficial donde se precisa que la prolongación del Diana Laura se estrecha al poniente de la Carretera Internacional.
Es así que el establecimiento de los Millán se encuentra sobre propiedad privada, cuyos dueños arrendaron el lugar a los copropietarios del Chefcito Taco Fisch.
El curso de los acontecimientos evidencia que la acción fascistoide del funcionario municipal es una furiosa respuesta al trabajo periodístico de Javier Millán.
Así Morales Uruchurtu inauguró el desgraciado delito de atentar contra el trabajo periodístico en Sonora, el cual se tipifica en el Artículo 73 de la Constitución de la República.
Hace apenas unos días se federalizan los atentados contra periodistas y los delitos que tengan el propósito de impedir, limitar o menoscabar el ejercicio de la libertad de información.
Dicho postulado recién se aprobó por la Cámara de Diputados, en lo que también se faculta a la Procuraduría General de la República (PGR) a atraer ese tipo de delitos cuando se consideren del fuero común.
Sin menoscabo de lo anterior, la disposición de Uruchurtu igual atenta contra el trabajo honrado de dos guaymenses y su derecho a emprender negocios para mejorar su situación económica.
“Hasta ahora tengo evidencia documentada de Uruchurtu, pero no descartó actuar en términos de ley contra otros funcionarios”, expresó Javier Millán.
Por lo pronto, dijo, emprenderá acciones de tipo penal contra Morales Uruchurtu, al tiempo que le denunciará en Contraloría Municipal y ante el gobernador Guillermo Padrés Elías.
“El gobernador debe saber que en Guaymas la libertad de expresión es pisoteada, que su proyecto de un Nuevo Sonora aquí es insultado por funcionarios corruptos”, acusó.
El Director de Carta Millán anunció que llegará hasta las últimas consecuencias y no descarta ejercer su derecho constitucional a la manifestación de sus ideas a través de una huelga de hambre.
También dijo esperar solidaridad del gremio periodístico y la ciudadanía de Guaymas pues, dijo, esto puede pasarle a cualquiera mientras se actúe con indolencia ante orates políticos como Uruchurtu.