Periodistas: tiro al blanco

Así dice la nota publicada por algunos medios:

“El titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Emilio Chuayffet Chemor, condenó a nombre del gobierno federal los ataques en los últimos años contra periodistas y medios de comunicación, por lo que subrayó la decisión del presidente Enrique Peña Nieto de proteger a quienes integran el gremio.
"Agredir a un periodista o a un comunicador en el ejercicio de su labor, es agredir a la sociedad en su derecho a ser informada, a conocer, a comunicar y a tomar decisiones libres y autónomas", sostuvo durante la clausura de la reunión de medio año de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).
“Cuando se agrede a un periodista, no sólo se violan los derechos individuales del afectado, sino también los derechos colectivos de la comunidad, agregó.”

Manuel Buendía.

No recuerdo ya cuántas veces he leído esta nota. Lo que sí me queda muy claro que el único cambio que le observo son los nombres de las personas, porque el contenido siempre es el mismo. Es decir, “la misma gata pero revolcada”. Cada principio de sexenio el gobierno “establece su postura” de “proteger” a quienes pertenecemos al incomprendido gremio del periodismo… la misma mentira, pues.

En lo personal, me sigue impresionando mucho la desaparición de Alfredo Jiménez Mota, aquel intrépido muchacho que trabajó bajo mis órdenes en el periódico El Vigía, y a quien tuve que frenar en varias ocasiones en su afanoso intento de exhibir a quienes se dedicaban a asuntos relacionados al narcotráfico y otras “lindezas”.

“Garantízame que si nos matan a ti y a mí se va a terminar la delincuencia organizada para siempre en México y le entramos al tema”, le dije a manera de broma alguna vez. Y no lo dejé que hiciera publicaciones del tipo. Yo no sé si fue enfado o deseos de estar en medios en ese entonces más importantes lo que lo llevó a renunciar y viajar a Hermosillo, donde se enroló en las filas del periódico El Imparcial. El resto de la historia ya todos la conocemos. A medias, pero la conocemos.

Hoy las palabras de Chuayffet Chemor sólo me provocan risa. A veces trato de entender la cínica capacidad que tienen muchos políticos para mentir deliberadamente y hacerlo con una seguridad que quisiera uno creer en sus palabras. Lo cierto es que el titular de la SEP sabe que esa protección de marras ofrecida por el actual gobierno no es más que un circo barato que, lejos de hacernos sentir seguridad, nos causa más temores ante la impunidad con que trabajan los delincuentes en México.

Héctor Félix.

El gremio periodístico es uno de los más desprotegidos por los gobiernos habidos y por haber. Desde el artero crimen de Manuel Buendía Tellezgirón y Héctor “El Gato” Félix Miranda, el asesinato de periodistas se ha convertido en un vulgar juego de “tiro al blanco”, a través del cual han fallecido bajo las balas criminales centenares de comunicadores, algunos de ellos sometidos a crueles torturas antes de ser ultimados.

Esa es la razón por la cual el grueso de los miembros del gremio se han sometido a la simple redacción de una nota informativa que, entre más alejada esté de la delincuencia, mejor. Ya ni el periodismo honesto y responsable es garantía para no ser víctima del ataque de los criminales, que al no ser ubicados por los gobiernos en turno, se convierten en cómplices de éstos. Tal pareciera que quieren acabar de una vez por todas con todo lo que huela a comunicación.

Hoy Chuayffet Chemor asegura que se protegerá a los periodistas. Desgraciadamente estoy convencido de que no pasarán muchas semanas para taparle la boca.