Cuando Everardo Martínez Samaniego fue candidato a Presidente Municipal de Guaymas en 1997, dentro de su propuesta de proyectos figuraba uno que causó cierta polémica: la desaparición del antiguo cementerio de la calle 10.
Martínez Samaniego no alcanzó su propósito electoral, y entonces el tema quedó en el olvido, hasta que años después, el conocido guaymense Víctor Roberto Parra Maldonado retomó el caso y estuvo insistiendo en la necesidad de desaparecer ya el viejo panteón. Su insistencia pronto quedó sepultada también.
Ante la cercanía del Día de los Fieles Difuntos a principios de noviembre, se espera que las autoridades nuevamente volteen sus ojos al camposanto y lo aseen ante la gran cantidad de personas que acuden en esas fechas a las tumbas de sus seres queridos. Sólo hasta entonces se procede a dar una limpieza general en el sucio lugar, punto de contaminación para las colonias que están en sus inmediaciones.
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