Pudo haberse evitado…

Efectivamente, hay muchas cosas que “no encajan” en el caso del asesinato de la joven estudiante Maricruz Collins Martínez, pero hay una en particular que podría tomarse como causa real de la muerte de la muchacha: el increíble desprecio que las leyes tienen para proteger a la sociedad civil de la delincuencia.

Analizando cada una de las informaciones que se generan tras el crimen de la joven estudiante del CET del Mar (por cierto, plantel que en un mes sufrió la muerte de tres de sus alumnos y todos en dramáticas circunstancias), es lógico llegar a la conclusión de que algo muy perverso sigue ocurriendo en las instancias para la impartición de la justicia, un algo que podría estar impregnado de la corrupción que todos los políticos prometen sepultar, pero que al final se encargan de seguirla incentivando.

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