miércoles, 18 de enero de 2012

No cabe duda que en cuestión de tecnología, en México seguimos estando en pañales. Un cambio simple de domicilio de una línea telefónica se convirtió en un dolor de cabeza para nosotros, puesto que nos dejaron sin Internet. La justificación: “es que ustedes pidieron un cambio de paquete y por eso se les dejó sin el servicio”.
Ya cuando finalmente se convenció al “técnico” de que el mentado cambio de paquete jamás se había solicitado, pidió comprensión: “tienen que esperar por lo menos un día más para que se les restablezca el servicio”. Es decir, nosotros no tuvimos la culpa, pero sí tenemos que pagar las consecuencias de la equivocación de la gente “responsable”.
Ofrezco mil disculpas por la presunta desatención a nuestro blog, pero eso fue lo que pasó. Y debo agradecer, de paso, la gentileza de quienes, dicho sea de paso, se esmeraron para cumplir con su trabajo y trabajaron tiempo extra para resolvernos el problema.
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LO ocurrido en el show del remedo de payaso conocido como “Platanito” es una evidencia más que clara de la degradación a la que han llegado los valores morales, llegándose al extremo de hacer gala de los instintos más bajunos y a las peores manifestaciones de la vulgaridad y el desenfreno para poder llamar la atención.
No es ninguna novedad la burla con la que el payasucho ese trata temas delicados, pero haberse carcajeado de la más infame tragedia que haya vivido Sonora, en la que 49 inocentes bebitos murieron literalmente calcinados, no tiene perdón. Un ofrecimiento de disculpas sólo viene a ofender más y a causar más daño al corazón, no solamente de los padres y demás familiares de las inocentes víctimas, sino de todos los que habitamos esta entidad.
Aunque tenemos que entenderlo: la culpa no es del pendejo ese que lastimó profundamente la memoria de los pequeños, y que faltó cruelmente al respeto a los sonorenses. La responsabilidad de esto es de la empresa televisiva a la que pertenece, la cual le ha permitido ese tipo de estupideces, todo con el despreciable afán de asegurar así una mayor cantidad de auditorio. Porque si bien es cierto sus infames comentarios los hizo en un show privado, bien pudo haberlo hecho en su “programa” de televisión abierta.
¿Qué calidad moral puede tener el conductor de un programa de TV que se atrevió a llamar la tragedia de ABC como “Kentuky Fried Childrens” y les haya llamado “chavitos al pastor” como para mantenerlo activo en el programa de marras? ¿Esa es la calidad moral que tiene Emilio Azcárraga, el poderoso propietario de la empresa Televisa como para consentir que el despreciable sujeto haya cometido semejante infamia y no castigarlo?
Lo manifestado por el ruin individuo debiera haber provocado otra reacción, como haberlo suspendido de inmediato y definitivamente del programa que conduce, pero es evidente que su poca madre le conviene más al señor Azcárraga, de tal forma que estarle pasando por alto todo esto sólo lo motivará a seguir haciendo alarde de su ínfimo criterio y su desprecio por el dolor de los demás.
Por desgracia, lo hecho por “Platanito” no es más que otro de los muchos casos más que hoy en día presenciamos en comunicadores que han hecho de sus programas el más miserable alarde de la pobreza de valores, de la prácticamente nula cultura que existe en conductores que ni siquiera entienden el significado de la palabra respeto, y de la forma tan pasiva en que actúan las autoridades aún cuando no se cumple con los más elementales principios legales de la comunicación.
De última hora, me enteré de que al tal “Platanito” lo habían suspendido de su programa. No sé si sea suspensión a manera de castigo, pero por lo pronto ya no había aparecido en su programa de TV… es lo menos que merece.
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SE pone interesante la lucha interna en el PRI por la candidatura a la diputación federal del 04 Distrito. Cuando parecía que Marco Antonio Ulloa Cadena la tenía prácticamente “amarrada”, surgieron otros fuertes aspirantes, por lo que las cosas seguramente se complicarán bastante en los próximos días.
Por lo pronto anote usted a Carlos Ernesto Zataráin González, quien fue estuvo en el Congreso de la Unión, Antonio Astiazarán Gutiérrez, que ya ocupó también esa curul, y se menciona también a Julián Luzanilla Contreras, quien de plano, ya no halla donde acomodarse para seguir viviendo del erario.
En lo particular, creo que si el PRI quiere tener posibilidades de conservar esa posición, lo mejor que podrían hacer es tranquilizarse todos y dejar que las cosas sigan el curso que llevaban.
El PAN viene dispuesto a quedarse con esa posición, y una lucha interna en el PRI por esa candidatura los dejaría en “excelentes” condiciones de perder por vez primera el proceso electoral.
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Francisco Ponce Vázquez “El Pío”, le donó al PAN un terreno, para que se construyan ahí las oficinas del partido, según dijo Francisco López Lucero.
¿No querrá cambalache por la alcaldía suplente?

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