Su cuerpo está
siendo velado en Funeraria San Francisco; sus funerales este lunes a las tres
de la tarde
Guaymas, Son.- (Tomado de
Opinión Sonora) Indignación, rabia y coraje se ha estado expresando a través de
las redes sociales por el crimen del joven guaymense Mario Eduardo Arce
Rodríguez, cuyo cuerpo calcinado ha llegado a Guaymas, procedente de Mexicali,
en donde fue privado de la vida.
Entre otros mensajes más están
los de solidaridad hacia los padres del malogrado estudiante, condolencias y
buenos deseos porque Dios les dé fortaleza para salir delante ante tan duro
trance que hoy les toca vivir.
Mary Moreno comenta en
Facebook: “Que crueldad humana, matar por dinero, Dios perdónalos por lo que
han hecho”; el capitán José Albáñez, desde California, comenta: “Por qué lo
mataron tan joven… pena de muerte para los responsables”, en tanto Raquel Villagómez
López dice: “Que tristeza que una persona con un futuro exitoso, basado en
esfuerzo y deseos de superación haya sido truncado por unos malditos
criminales”.
Por su parte, Kay Mari
comenta: “Estamos en un mundo de mucha crueldad, donde existe gente sin
corazón, que es capaz de hacer daño; quiera Dios no escapen, y cuando sea hora
de pagar, pagarán donde más les dolerá”.
Alicia Ruiz escribe: “No
merecía esto, por qué tuvo que ser así”; Tony Salgado por su parte, hace el
siguiente comentario: “Ojalá pronto se logre llegar a los culpables del crimen,
y que se castigue con toda la ley; da tristeza como hay gente que no tiene
ningún valor a la vida hacia sus semejantes; les da lo mismo matar algún perro
que a un ser humano”.
En otro comentario, en las
mismas redes sociales, Silvia Guerrero Tovar refiere: “El ya descansa de tanta
miseria y maldad que hay en este mundo; Dios perdone a los que le arrebataron
la vida, porque como dijo Jesús no saben lo que han hecho”.
Viviana Hernández dice:
“Rolemos la foto del que según le iba a vender el carro; tiene que pagar por lo
que hizo, sé que eso no le devolverá la vida a Mario, pero ya estamos cansados
de tantas injusticias, tanta violencia, y si la policía no hace nada, tenemos
que hacer algo nosotros; que tristeza que con tanta facilidad terminen con la
vida de las personas, y dañen de por vida a una familia, tan joven y con toda
la vida por delante; tantos sueños por cumplir; Dios te suplicamos justicia”.
Mildred Montiel Noriega señala
en su comentario: “Que triste saber que hay gente con tan mal corazón, en serio
que no puedo creer tanta maldad”, mientras que Carolina Robles redacta: “Pero
por qué eligen Mexicali, aquí la gente es buena, aún confiamos, somos
solidarios, ojalá esos malditos ya estén viviendo su infierno en vida”.
Luisa Márquez: “Sin palabra,
sin haberlo conocido siento dolor, tristeza de saber su historia de cómo murió,
esperemos se haga justicia, que todo en este mundo se paga lo bueno y lo malo
se regresa”.
En tanto Maricela Torreblanca
comenta: “Cada quién es libre de vivir la vida como le plazca, pero de ahí a
cometer un crimen es demasiado; sobre todo a un inocente, le digo así porque
las personas que andan en lo sucio a eso se exponen, y esta personita y su
familia no merecían este dolor; lo que nos resta es pedir a las autoridades
hagan su trabajo; siempre me he preguntado si las personas que salvajemente
tratan a un inocente así, tendrán madre, hermanos, esposa, hijos, esposo, hija;
¿ se atreverán a decirle a un hijo, te amo?”.
Francisco Aranda dice: Es una
vergüenza para nuestra ciudad — Mexicali — que estén ocurriendo crímenes como
el del joven Mario Eduardo, un joven estudiante que llegó a nuestra ciudad con
el único fin de estudiar y tener un mejor futuro para él y su familia;
esperamos que su muerte no sea en vano y ahora sí investiguen bien las
autoridades judiciales para que su crimen no quede impune y se meta a la cárcel
a esas lacras que andan libres entre nosotros”.
Lucy González López escribe:
“Yo creo que esto no debe terminar aquí hasta que no se le haya hecho justicia
y los culpables paguen por esa atrocidad; justicia para él y su madre; señora
hoy perdió un hijo, pero ganó un ángel”.
El cuerpo de Mario Eduardo
está siendo velado en Funeraria San Francisco; a las tres de la tarde le darán
misa en el templo del Sagrado Corazón de Jesús, y de ahí partirá el funeral al
panteón Héroes Civiles de Guaymas. ¡Descanse en paz!
Ubican a posibles implicados
La pareja conformada por José
Sánchez Macías y Lorena Cortés Varela, bien pudieran estar involucrados en la
desaparición y muerte del joven vecino del sector Guaymas Norte, Mario Eduardo
Arce Rodríguez, pues fueron
los últimos que tuvieron contacto con él.
Así lo deja entrever la cuenta
de Facebook, que con el nombre de ‘Buscando a Mario Eduardo’, se abrió en esa
red social a raíz de su desaparición, el pasado 17 de julio del presente año.
Con fotos de la pareja, el
mensaje en cuestión publicado en dicho muro el día 20 de octubre, refiere que
fue el de nombre José Sánchez Macías, quien habría hecho la publicación mediante
FB, en el mes de junio, sobre la venta de un auto, vehículo que le había
interesado a Mario Eduardo para comprarlo.
De esta manera lo contactó,
quedando en que luego le daría el anticipo; unos días después el supuesto
‘vendedor’, de nombre José, le avisa a Mario Eduardo que el vehículo que le
estaba ofreciendo en venta se lo acababan de robar, pero que le conseguiría
otro parecido.
Durante ese tiempo se
mantuvieron en contacto mediante Facebook, en una comunicación constante, hasta
que José finalmente le informa que ya le había conseguido otro vehículo, un
Malibú, sólo que se trataba de modelo más reciente, y que él únicamente sería
el intermediario, sólo que el propietario supuestamente siempre ignoró los
tratos que José estaba haciendo con Mario Eduardo, y cuando fue abordado por
las autoridades dijo que nunca había recibido el anticipo que Mario le había
entregado a José.
Así, fue el día 17 de julio,
la fecha en que desapareció, cuando José (vendedor) cita a Mario Eduardo en la
casa donde vivía con su pareja Lorena Cortez Varela, en el fraccionamiento
Infonavit Cucapah, por la calle Ponciano Orozco, en la ciudad de Mexicali, Baja
California, lugar hasta llegó el joven guaymense, ilusionado por lo que sería
la compra de su nuevo automóvil, acude llevando consigo 60 mil pesos en
efectivo, para cerrar trato, en el entendido que igualmente ahí mismo
entregaría su carro en el que andaba, un Mazda color verde, que era parte de la
negociación, pues no lo había podido vender por fuera.
Las sospechas de que esta pareja
bien podría estar relacionada en la desaparición y muerte de Mario Eduardo
Arce, se centran, en que luego abandonaron ese domicilio, y ya no aparecieron
más, en ningún lado.
En aquella
publicación de ‘Buscando a Mario Eduardo’, del 20 de agosto, se apuntaba que si
alguien había visto a estas personas, que por favor les hicieran saber que la
familia estaba interesada en saber qué pasó aquella noche, pero nunca
contestaron ningún mensaje.
Opinión Sonora
www.opinionsonora.com
Pobre muchacho descanse en paz. Que esto sirva de leccion para todos nosotros y no ser tan confiados por que enverdad hay gente mala. Recuerden que cada cabeza es un mundo y nunca se save de lo que es capaz de hacer.
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